PRESENTACIÓN


jueves, 24 de noviembre de 2011

Año 2008 Titulo Carroza "Memorias de Jaypur"


              1908 / 2008 cien años de historia del mejor festejo de Laredo, el más artístico de todos cuantos haya tenido en su historia.
             Por fin llego la fecha, Laredo se dispone a celebrar el centenario de la gran Batalla de Flores.
               Nuestros tatarabuelos, abuelos, padres, todos, absolutamente todos nuestros antepasados siempre se han sentido orgullosos de su Batalla de Flores. A lo largo de estos cien años, se han sucedido toda clase de acontecimientos, dos guerras mundiales, una guerra civil, una posguerra, tempestades, y mil y un acontecimientos más, y a pesar de todo eso, a pesar de todos los años, aun hoy  celebramos esta maravillosa fiesta, orgullo de todos los Laredanos.
             Por eso, ese veintinueve de agosto del 2008, día de la celebración del centenario de nuestra emblemática fiesta, todos los carrocistas soñaban y anhelaban triunfar en esa mágica fecha. Todos los grupos participantes, más que nunca en los últimos años, se volcaron en realizar sus mejores creaciones, sus mejores carrozas para estar a la altura y tener posibilidades de ganar el centenario de la Batalla de Flores.
            Todo estaba dispuesto para el comienzo del desfile, a nosotros ese año premonitoriamente, nos había tocado en el sorteo previo, tener el honor de desfilar en primer lugar, y por supuesto cuidamos todos los detalles para estar a la altura de tan magnífica ocasión.  
            Al igual que el resto de grupos participantes, nosotros ese año nos volcamos por completo para realizar una carroza que ganase esa edición tan especial, única, irrepetible. Por eso no escatimamos en esfuerzo, ganas e ilusión. Cuidamos hasta el más mínimo detalle, apostamos por un diseño oriental, tratando de darle un tratamiento donde se conjugase la originalidad, con la belleza y la interpretación de tan maravilloso lugar. Así mismo cuidamos y pusimos mucho énfasis, en el diseño de los trajes que lucían las chicas que adornaban la carroza, y también en el vestuario de los que empujaban la carroza y por supuesto cuidamos mucho la puesta en escena, ya que en nuestro grupo siempre hemos considerado que en un desfile como es el de la Batalla de Flores, hay que cuidar todos los detalles y hay que dar espectáculo y eso no solo se consigue con una buena carroza, que desde luego es lo principal y fundamental, sino que también es importante cuidar todo lo que rodea a esta, para que el publico contemple un espectáculo completo, un espectáculo con clase, con elegancia, con alegría, en definitiva un conjunto que engrandezca nuestra fiesta y la posicione, como se merece, a un alto nivel.




             El desfile comenzó con retraso y se tardo muchísimo en realizar todas las vueltas al recorrido, en realidad se hizo muy tedioso, pesado, pero los nervios por el desenlace final nos mantuvieron en todo momento en tensión, expectantes por el veredicto del jurado. Y con esa tensión a flor de piel llagamos a la altura de la tribuna presidencial, ya en la última vuelta, justo en el “aterrador” momento de recibir el premio otorgado.
       En esos momentos de ir a escuchar el veredicto del jurado, normalmente son instantes de una gran tensión, de grandes nervios, momentos donde no sabes si es mejor quedarte allí o salir corriendo para no escuchar nada, momentos donde te juegas prácticamente todo el esfuerzo realizado, toda la ilusión puesta.
         Pues bien, si normalmente todos los años tienes esas sensaciones, imagínense la enorme tensión que vivimos ese año tan especial, ese año del centenario, ese año donde te jugabas pasar a la historia de tan precioso acontecimiento, ya que si alguna fecha  se recordara siempre que se hable de la historia de la Batalla de Flores, al menos durante los próximos cien años, no serán otras que la del año de inicio del festejo y la del año de su centenario y lógicamente de las carrozas que se alzaron vencedoras esas dos ediciones, 1908 carroza ganadora “la Argentina” y 2008 “Memorias de Jaypur”
       Pero volvamos al momento mágico cuando delante de la tribuna presidencial esperábamos el veredicto del jurado y conocíamos por fin el premio recibido. Se demoro muchísimo, en exceso, la gente en las gradas se impacientaba y nosotros en la pista sentíamos que nos faltaba hasta el aire.
       De pronto el presentador anuncia que ya tiene en sus manos el recuento final de los votos, y comienza a anunciar los premios.
       Memorias de Jaypur, de la Asociación Cultural Carrozas Oruña, Primer Premio en Carroza y Primer Premio en Vestidos…..  En esos momentos las sensaciones y las emociones afloraron de muy diversas maneras, hubo quien lloro, los más, hubo quien rio, salto, se abrazo, grito o simplemente como yo mismo, que caí de rodillas, alce los brazos y di rienda suelta a toda la rabia, emoción y tensión que había acumulado hasta ese momento. 
        Es muy difícil de explicar en palabras todas las emociones que se vivieron en esos momentos, al menos yo no me veo capaz de encontrar las palabras que relaten de manera fidedigna esos instantes tan, tan emocionantes.
        Fue un año maravilloso, hicimos historia y a mí no me queda otra cosa que dar las gracias al pueblo de Laredo por mantener tan viva año tras año esta maravillosa fiesta, a todos mis compañeros carrocistas que demuestran año tras año todo su arte y todo su ingenio y ese año en especial demostrando que son verdaderos artistas, y sobre todo como es de bien nacido el ser agradecido, dar las gracias a todos nuestros colaboradores que además son nuestros amigos, por todo su esfuerzo y toda la ilusión que demuestran año tras año y lo mismo han sabido estar en momentos tan mágicos y maravillosos como fue este año del centenario, así como cuando la suerte no nos ha sonreído y sin embargo siempre, siempre han estado a nuestro lado y no han dejado nunca de ayudarnos poniendo en ello toda su alegría, ilusión y esfuerzo.




                 Pasó el año del centenario y para nosotros, para nuestro grupo siempre será un fecha de ensueño, un fecha para el recuerdo de magnificas sensaciones, de una alegría inmensa, una fecha y un recuerdo que a nosotros nos ha compensado por los disgustos y malos ratos que a veces hemos sufrido, una fecha donde hicimos historia y gracias a la cual siempre se recordara a este humilde grupo, que lo único que siempre, pero siempre, siempre tiene claro son dos cosas fundamentales:
       Una, disfrutar, divertirse y pasar magníficos momentos en compañía de sus amigos de verdad.
       Y Dos, trabajar y poner todo su empeño y toda su ilusión en hacer cada año una buena carroza que ayude a engrandecer y hacer cada vez más grande y más importante  esta maravillosa fiesta que tenemos en Laredo, y que no es otra cosa en esencia, que un desfile de Originalidad, Fantasía y Arte, cubierto de Flores
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jueves, 17 de noviembre de 2011

Año 2007 Titulo Carroza "Rumbo al Sol Naciente"

            Siempre buscamos tres cosas principalmente al diseñar nuestra carroza cada año, que aunque por simples y obvias que parezcan, no por eso dejan de ser la realidad.
            En primer lugar que sea bonita, que al margen de ser mejor o peor carroza, que sea grande o pequeña, al margen de todo eso, buscamos que sea bonita, que al contemplarla el público vea una bonita creación.
          En segundo lugar que sea original, diferente, que el tratamiento que le demos al tema elegido sea lo más original posible.
         Y en tercer y último lugar que sea buena, y que quiero decir con lo “que sea buena”, pues muy sencillo, me refiero a que tenga una dificultad en el montaje, que tenga un buen reparto de espacios, que combine de manera acertada el colorido de toda la obra, que tenga una buena disposición en cuanto a espacios y puestos a ocupar por las chicas que lucirán en ella, etc etc…
            Por qué digo esto cuando me dispongo a hablaros de la carroza de este año que nos ocupa, pues muy sencillo, no es sino para explicar que algunas veces no hemos considerado necesario tener que hacer una carroza de enormes proporciones, de enorme tamaño, para  disputar un buen premio dentro de la calificación final, ya que aunque quizá la carroza diseñada para ese año no fue de un gran tamaño, no por eso, no volcamos todo nuestro interés, todo nuestro entusiasmo y todo nuestro esfuerzo en que la carroza a realizar no fuese una buena obra floral.
          Yo considero que, normalmente, para que una carroza gane la Batalla de Flores, además de tener los aspectos citados anteriormente, ser buena carroza, bonita y original, además ha de tener un tamaño y unas medidas al límite de lo legalmente permitido; Ahora bien, eso no quiere decir que una carroza solo por el mero hecho de ser grande, siempre ya tiene que quedar por delante de una carroza de dimensiones o volumen menor si esta es mucho más bonita que la otra. Es decir el ser grande, tener un gran volumen no es razón por si sola suficiente para ganar el festejo o para calificar por delante de carrozas de menor tamaño, pero más bonitas y originales que ella.


         Rumbo al Sol naciente, titulo de nuestra carroza ese año, fue una carroza, no de grandes dimensiones, pero si de una belleza, originalidad y ejecución excelentes. A su favor debo decir, que no exagero si digo que esa carroza ha sido una de las que mejor acabado, en cuanto al trabajo de “clavado de la flor”, ha desfilado en las más de cien ediciones de la batalla de flores, también digo que tenía un excelente diseño y una muy buena colocación de las piezas, así como un precioso colorido. Además en esa carroza se lucieron los mejores vestidos de ese año a los que no podía ser menos les otorgaron el primer premio en vestuario. A cambio, en su contra también diré que en cuanto a originalidad no podríamos decir que la tuviese en exceso ya que son muchas las veces que se ha tratado un tema oriental desde la perspectiva de un barco bajo una puerta y con dragones como figuras principales, así mismo también digo que no fue una carroza de grandes dimensiones ni excesivo volumen.
              Ahora bien, expuesto lo anteriormente dicho, y tratando de ser lo más objetivamente imparcial, me atrevería a decir que desde luego que no fue una carroza como para ganar la Batalla de flores ni incluso para quedar entre los tres primeros puestos, ahora bien tampoco fue de recibo que la calificasen en un Séptimo  lugar, puesto a todas luces inmerecido y totalmente injusto.
         Y así mismo lo considero la gran mayoría del público  asistente, el cual al oír el veredicto del jurado rompió masivamente en pitos y abucheos, recriminando de esa manera el puesto otorgado por el jurado.
            Debo y me enorgullece recordar una anécdota, al menos para mí inédita, y que refleja de manera clara y concisa el enorme enfado e incomprensión del público asistente al desfile, y es que una vez anunciado el puesto otorgado por el jurado y después de subir educadamente, como no podría ser de otra manera, a recibir el trofeo correspondiente, mandé a mis colaboradores mover la carroza y seguir avanzando en el desfile, y fue en ese momento cuando a medida que nuestra carroza avanzaba, el público de las gradas se iba poniendo  masivamente en pie y sin parar ni un instante de aplaudir, nos fueron transmitiendo todo su apoyo y consideración hacia nuestra carroza.


          Para nosotros eso supuso una enorme inyección de moral y nos ayudo a sobrellevar de mejor manera el disgusto recibido, a la vez que nos compenso y nos enorgulleció el comprobar que para el público nuestra carroza merecía una mucha mejor calificación.
        

sábado, 12 de noviembre de 2011

Año 2006 Titulo Carroza "El Fantasma de la Opera"

      Algunos años, después de darnos el premio correspondiente, hemos tenido que oír que era una pena que la carroza no hubiese sido más grande, por que de ser así, habríamos ganado seguro. Lo más curioso es que cuando la carroza realizada por nosotros ha sido grande, muy grande, esa misma gente ha dicho que era una pena que la carroza fuese tan recargada y tan grande.
       Eso es exactamente lo que nos sucedió ese año, hicimos una muy buena carroza, de gran tamaño, original y de muy buena ejecución, y sin embargo tuvimos que oír que era una pena que estuviese tan recargada, cuando por curioso que parezca, la carroza que ese año se alzo con la victoria, estaba mucho más recargada que la nuestra.
         Debe de ser que las mismas normas no valen para todos igual, y eso no me parece una medida muy justa, ni muy positiva para el buen devenir del desarrollo de la fiesta.


       El fantasma de la opera, titulo de la carroza de ese año, como ya he dicho anteriormente, una carroza con una planta imponente, con una muy buena ejecución y un diseño bastante original.
         Una enorme lámpara de ocho brazos y más de cuatro metros de diámetro, colgada de un pedestal sujeto por cuatro columnas, coronadas todas ellas por otras tantas gárgolas. En las cuatro esquinas de la carroza y así mismo sobre columnas, las figuras de cuatro ángeles sosteniendo unos candelabros entre sus manos. Así mismo enmarcando toda la carroza y por tanto a sus cuatro costados, otros tantos antifaces de cinco metros de anchura cada uno. Y en lo más alto de la carroza, en el pedestal por encima de la lámpara, la representación del fantasma coronando y dominando toda la obra.
       Al final ese año nos otorgaron un tercer premio, y aunque es uno de los puestos de honor a nosotros nos supo a poco y siempre hemos pensado que ese año, una vez más, no se hizo del todo justicia con nuestra carroza. No obstante, como nunca me canso de repetir, para nosotros lo más importante es participar y colaborar año tras año en hacer más grande aún si cabe esta maravillosa fiesta, aunque también es verdad, que a veces se hace muy difícil sobrellevar estoicamente tantos palos y a mi humilde juicio, tanta injusticia. 



miércoles, 2 de noviembre de 2011

Año 2005 Titulo Carroza "Cabaret"

         Un año más este fue un año de transición, con una carroza que a la postre quedo un poco sosa, no cumpliendo ni de largo las expectativas que nos habíamos planteado. Aunque a decir verdad tampoco ese año fuimos a por todas, limitándonos a confeccionar una carroza para estar arriba en los puestos de honor, eso sí, pero no con el ánimo claro de ir a ganar la edición de ese año.
          Buscamos ese año un diseño un tanto diferente a los que veníamos realizando los últimos años, y la verdad es que no nos quedo como esperábamos, además ese año tampoco fue muy bueno en cuanto a variedad de flores, teniendo una muy buena cosecha en cuanto a claveles y muy muy mala en cuanto a las dalias se refiere.


        Además ese año realizamos una cosa poco común en nuestro estilo y es que cambiamos de manera muy significativa el diseño de la carroza a medida que fuimos realizando el montaje de la misma. Cierto es que, como es un tanto normal, siempre se realiza algunos pequeños cambios a la hora de montar la carroza, pero es que ese año los cambios fueron muy sustanciales, muy notorios y ahora al visionarlos con la perspectiva del tiempo, fueron muy poco acertados y ayudaron muy poco a la hora del resultado final de la obra.
        Como anécdota ese año diré que entre las personas que suelen lucir en nuestras carrozas, ese año sacamos a dos muchachos en la parte delantera de la carroza, cuando es bien sabido que lo más normal es que sean chicas las que salgan y luzcan en las mismas. Destaco este motivo ya que no suele ser muy usual contar con la presencia de figuras masculinas actualmente en las carrozas.



                  Al final nos otorgaron un cuarto premio, considerando que fue un puesto del todo justo y con el que nos quedamos satisfechos ya que como he dicho anteriormente, la carroza no quedo a la altura de nuestras expectativas.